miércoles, 18 de marzo de 2020

Coróname ésta!

¡Coróname ésta!
(Absurdo Cruel)

Uno en un despacho. Otro entra con obvias señas de que ha matado a alguien brutalmente.

¿Se lavó las manos?

¿De qué? si yo acepto mi responsabilidad…

Le digo que si se lavó las manos para no contagiarme.

¡Ah, pensé que hablaba del asesinato de mi mujer…!

¡Su mujer! ¿Y quién le dijo que le pertenecía?

¡Pff, pues… la iglesia, el estado,… su papá!

¿Mi Padre qué tiene que ver en esto?

No sé, a ver, usted dígame ¿Qué tiene que ver en esto su papá?

Nada que ver.

¿Está ciego?

Sí.

¿Y su mujer?

¿De quién?

La suya

Yo no tengo.

Se nota.

¿Qué? 

Que madre no tiene

Cómo explica que esté aquí

Llegué en taxi

Yo!

Usted no sé, pudo haber llegado a gatas.

¿Quiénes?

Nada

Luego entonces…

Eso

¿Qué me decía?

Que preven el fin de todo esto para abril o para mayo

¿No se pueden poner de acuerdo?

No sé si quieran.

Uno mira a otro con asco

Aquí está la llave del baño.

¿Para qué?

Para abrir la puerta.

Para qué

Para que entre

¿Quién?

Usted!

¿…a la puerta?

¡Por la puerta!

Y esto… ¿es porque maté a mi mujer?

“Mi mujer”…Es por la sangre.

Le molesta.

¿Que haya matado a su mujer?

No, la sangre.

Sí.

Y mi mujer.

¡Que no es suya!

No pues ahora ya no es de nadie, ni de sí misma. (Toma la llave) Me voy a lavar las manos.

Eso, y no vuelva a entrar aquí con sus desavenencias!

Entré sólo… (y solo se va).



No hay comentarios:

Publicar un comentario