jueves, 29 de junio de 2023

Quisiera sentir

 Quisiera sentir esos visos de vicio que entumencen y exaltan

esas noches extremas de pecados que vejan el alma, 

las desveladas mañanas desaliñadas bañadas de ansias 

Quisiera sentir como una banda de mariposas corroe mi entraña

sentir que la vida se desmorona y quebranta

sin parir chayotes, partirme el lomo o romperme la cabeza

Quisiera sentir el pasmo ante las desquiciadas tretas del abismo y

profanar las exequias de la pasión disipada

las soterradas brechas entre el goce y el cese

las encerradas prisiones que enjaulan el espíritu indomable.

Quisiera sentir la precipitación angustiosa que arrebata la tranquilidad

esa furiosa marejada de excitación fervorosa que azota al más fuerte.

No hablo de ese sentimiento precario que enaltece y esculpe a garrote y espada

sino del frenesí que desborda, abarca y profundiza lujurioso se encarna. 



sábado, 17 de junio de 2023

La envidia de la muerte

Quieres renacer en los sótanos de la ataraxia

en las trasegadas tormentas que intimidan a las catalinas

en los almidonados resquicios  que sofocan la paz y la tranquilidad.

Quieres volver a vivir maniatado a la eternidad

fruncido en las honduras de lo hondo

retacada en el espesor de la muerte

encarcelada por los siglos de lo siglos….


No puedes volver a  

vivir de nuevo

el veinte cayó 

rompieron tu boleto y el grupo ya se fue

dieron las doce campanadas 

cerraron la puerta

se rompió en caso de emergencia 

y no sirvió de nada.


la muerte es el fin del orgasmo final.


Te han dado por culo y te han dejado una nalgada contundente.


No busques ni esperes la vida que se aumenta en la negligencia de la existencia.


No busques ni esperes esa vida que espera, que aúlla, gimotea y suplica.


No busques ni esperes la vida que envidia la muerte.


lunes, 12 de junio de 2023

Qué tufo enegrecido

 Qué tufo enegrecido

lleno de sangre y vomitivo…

Cada nota es una cuchillada,

un zafarrancho es un jolgorio,

un homicidio, un  apetitoso 

roer de huesos huecos. 

Si una horquilla torna 

las almas extirpadas del cielo,

el anís estrellado comba 

las víctimas de perfumes indelebles.

Si la enraizada tortura blanda 

sucumbe a la inanición de los muertos,

el estanque de la serenidad 

se desborda enloquecido.

Cada reportaje deambula entre 

los persistentes espejos necios 

y las babas que escurren del hambre.