a Mariano
¿Por qué me aquejas
silencio?
Eres el silencio antes de,
siempre antes.
Tu hermano, el que se escucha luego,
ese es constante, seguro, terrible acaso
pero más terrible tú
incierto
eres la pausa antes del veredicto
eres el aire que corre, las hojas que crujen
antes del asalto
la espera de recibir
esa llamada
que llega
que no quieres que llegue,
la traes tú para romperte en mil pedazos
frente al incauto,
frente a mí que
en vez
quiero el silencio antes de un beso
el silencio antes de decir te quiero
ese silencio tan discreto que suena como risas, suspiros, gemidos y fanfarrias
ese silencio deseo
el silencio paz no tormenta
el silencio que se llena con la mirada como clarinete
el silencio que se escucha justo cuando tu yema atisba mis cuerdas
no el silencio angustioso, el silencio vacío
Déjame, no vengas a callar
las pompas y los platillos
no te anuncies entre mis oídos
deja al corazón en su alharaca
y su festín ruidoso
este sitio tan sólo tiene lugar para tu hermano
el silencio luego de la juerga
después, una vez que se ha consumado
que se ha vivido, que se ha llegado y conquistado
una vez que sea mío
silencio de tus ojos
y orquesta de mi vida.
Qué curiosa frase, ¿Por qué me aquejas silencio?, como si fuera éste un grito incesante, que aturde, que cala..., pero que solo es silencio, uno incesante, que aturde, y que se encarna en metáforas. Me encantó tu poesía, te conocía como actor, pero descubrir esta faceta me fue muy grata.
ResponderEliminarSaludos.